El 20 de enero de 1968 Syd Barrett toca por última vez en directo con Pink Floyd, ya que seis días después, cuando la banda iba a salir para el siguiente concierto, decidieron no pasar a recogerlo, pues con la incorporación meses atrás del guitarrista David Gilmour, perfectamente podían suplirlo. En la práctica suponía la expulsión del motor creador de Pink Floyd. Pese a ello, no anunciaron su salida del grupo hasta el mes de abril.