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¿Por qué Pink Floyd fue la primera banda de rock que sonó en el espacio?

Los astronautas rusos del Soyuz 7 habían declarado que se relajaban escuchando a Pink Floyd

El 24 de Noviembre de 1988, David Gilmour y Nick Mason llegaron a Moscú procedentes de Londres. Su destino final estaba en Kazajistán, en la base espacial de Baikonur. No quisieron perderse un momento único: el lanzamiento de la nave espacial Soyuz TM-7. Y no por capricho. A bordo del vehículo, junto a la tripulación, viajaba una cinta de cassette con las canciones de su disco ‘Delicate sound of thunder’. Por primera vez, una banda de rock sonaría en el espacio. Y esa banda de rock era Pink Floyd. Si bien es cierto que, en tan excepcional ocasión, temas como Money, Shine on you crazy diamond o Another brick in the wall sonarían sin Roger Waters.
‘El delicado sonido del trueno’ sin Roger Waters

Roger Waters se había marchado de Pink Floyd en 1985. Al ser la principal fuerza creativa de la banda, pensaba que no seguirían sin él. Les dijo a sus compañeros, «hemos roto, ya no habrá Pink Floyd nunca más». Sin embargo, David Gilmour y Nick Mason decidieron seguir, aun con una amarga batalla legal de por medio por el uso del nombre. En 1987 publicaron A momentary lapse of reason y se embarcaron en una gira mundial. Por primera vez con la ausencia del miembro fundador de la formación inglesa y la incorporación del teclista, Richard Wright, que se había marchado después de la gira de The Wall en 1981.

Y no solo eso, sino que grabaron los cinco conciertos de la gira en el Coliseo Nassau de Nueva York y con ese material publicaron Delicate sound of thunder. El directo, en formato de doble LP, doble casete y doble CD, salió el 22 de Noviembre de 1988. Además de los temas del nuevo álbum, contenía muchos de los viejos éxitos de la banda: Money, Shine on you crazy diamond, Time, Wish you were here, Another brick in the wall (Parte 2)…
¿Una petición de los astronautas?

Y aquí es donde entran en acción los astronautas rusos que se preparaban para emprender una misión espacial a bordo de la nave soviética Soyuz TM-7, la cuarta expedición de larga duración a la estación MIR (Mir EO-4). En una rueda de prensa, Sergei Krikalev y Alexander Volkov, confesaron que disfrutaban relajándose con la música de Pink Floyd. Según publicaba entonces la agencia AP, los promotores de la banda británica escucharon estas declaración y no dejaron pasar la oportunidad. Inmediatamente enviaron una copia de Delicate sound of thunder a Moscú, donde, después de pesarla y desinfectarla, la pusieron en ‘cuarentena’ para su inclusión en la nave.

Otros medios aseguran que fueron los cosmonautas los que pidieron expresamente escuchar Delicate sound of thunder mientras viajaban al espacio, y que, casualmente, ese álbum era el único de Pink Floyd que se había publicado oficialmente en la Unión Soviética.
La primera banda de rock que suena en el espacio

El 28 de Noviembre de 1988, solo seis días después del lanzamiento del directo de Pink Floyd, se producía el lanzamiento espacial de Soyuz TM-7. A bordo, además de los miembros de la tripulación, viajaba una copia en cassette de Delicate sound of thunder. Para reducir el peso, habían quitado la caja. “Decir que estamos entusiasmados ante la idea de ser la primera banda de rock que suena en el espacio es algo así como un eufemismo», decía David Gilmour.

mayor base espacial del mundo: el Cosmódromo de Baikonur (Kazajistán). Cuatro días antes, los dos miembros de la banda de rock progresivo habían aterrizado en Moscú camino a la región soviética de Asia Central. Según Tass (la agencia soviética oficial de noticias), inicialmente la presencia de los músicos había sido rechazada por parte de Glavkosmos (operador comercial de la agencia espacial rusa). Les dijeron que ya habían tenido suficiente publicidad accediendo a enviar su álbum al espacio. Pero EMI Records asegura que los dos músicos habían sido invitados.
«Me ofrecieron una oportunidad que solo se da una vez en la vida»

Antes de partir a Moscú, cuando todavía estaba en el aeropuerto londinense de Heathrow, Gilmour reveló: «Me ofrecieron una oportunidad que solo se da una vez en la vida, la de estar presente en un despegue espacial y creo que sería una locura rechazarlo». Y añadió, ″Espero grabar el momento y poder utilizarlo en un futuro disco de Pink Floyd». Cuando llegó a Moscú, bromeó «podría intentar pegarle un porrazo en la cabeza a un astronauta y ocupar su lugar». Además de los dos Pink Floyd, en el Cosmódromo de la Unión Soviética también estaba el presidente francés Francois Mitterrand (en la misión participaba el astronauta francés Jean-Loup Chrétien), entre otros VIPs.

Los cosmonautas dejaron el cassette en la estación espacial. Y allí siguió hasta 2001, hasta que la estación volvió a entrar en la atmósfera terrestre en el mes de marzo e inició el proceso de desintegración. Supuestamente, entre los fragmentos que cayeron sobre el Océano Pacífico Sur, cerca de Fiji, iban también los trocitos de ‘El delicado sonido del trueno’ de Pink Floyd.

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